El último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) nos da una visión alarmante pero realista de la crisis climática. La humanidad ha calentado el planeta a un ritmo sin precedentes en los últimos 2000 años, y los impactos ya son evidentes y generalizados.
El cambio climático es causado principalmente por las emisiones de gases de efecto invernadero, como el dióxido de carbono y el metano, producidos por actividades humanas como la quema de combustibles fósiles y la deforestación. El aumento de la temperatura global está provocando cambios drásticos en los patrones climáticos, con eventos extremos como sequías, inundaciones y tormentas más frecuentes e intensas.
El informe del IPCC destaca que debemos actuar con urgencia para limitar el calentamiento global a 1,5 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, el objetivo del Acuerdo de París. Esto requerirá una reducción drástica y rápida de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Además, el informe subraya la necesidad de adaptación. Debemos prepararnos para los impactos del cambio climático que ya están ocurriendo y que se intensificarán en el futuro, protegiendo a las comunidades vulnerables y construyendo resiliencia.
La crisis climática es el desafío más grande que enfrenta la humanidad. Necesitamos tomar medidas ahora para proteger nuestro planeta y nuestro futuro.